Curatoría de Circo, Ahora estuvo a cargo de Alain Veilleux

septiembre 12, 2019

Hacer el retrato de Circo, Ahora en Chile no es una tarea fácil. Este arte, noblemente tradicional, ha vivido durante las últimas décadas múltiples transformaciones.

Empezó con una generación espontánea que se agrupó en el parque Forestal, clavas en las manos, para reclamar el derecho de ocupar en el espacio público, pues se hizo “circo social” fomentando la resiliencia en miles de niños y niñas, y se apropió del título de nuevo, queriendo reinventar el mundo. ¡Bravo arte del circo!

Este camino sinuoso lo llevó a cuestionar su forma y contenido, a pensarse y escribirse mientrassu formación se estructuraba en clases, talleres y escuelas de formación preparatoria y profesionales.
Hoy es una terroir de ricas creaciones entre artistas jóvenes que ven en el desafío circense una forma de emanciparse de la imperfecta realidad y la posibilidad de dotarse de un oficio. Existe un abanico muy abierto de estéticas plurales. Aquí hay un vivero de artistas que no tiene nada que envidiar a los países del norte. Entre proyectos de investigación y nuevas creaciones, la pista chilena es muy efervescente.

Además de continuar esta interminable búsqueda del gesto extraordinario, cabe observar algunas constantes en las originalidades que emergen tales: el cuestionamiento de la forma, la voluntad de ser cada vez más sólido abrazando la danza, el teatro, el arte visual y la performance en la práctica creativa e interpretativa, el manejo del relato, la invención de ingeniosos dispositivos escenográficos quienes influencian y modifican la escritura y la técnica de los espectáculos. Todo esto redetermina su relación con el público y amplía el campo de percepción frente a la tradición.

Todos estos cambios fundamentales requieren una atención más detallada para comprender la revolución por la que está pasando el circo en el panorama contemporáneo de las artes. Pero si nos lleva a cuestionar el lugar que el arte debe ocupar en nuestra sociedad hoy en día.

Presentamos aquí en esta exposición solo unos pocos pictogramas de esta historia viva, donde obviamente hay más ausentes que presentes. Nuestro deseo es resaltar algunas creaciones, personajes en acción, para estimular su interés y su curiosidad por descubrir qué constituye lo que aquí se llama Circo, Ahora. Podrán disfrutar imágenes y extractos de los espectáculos La
Sangre de la Tierra e Impulso, respectivamente, la ONG Circo del Mundo y La Compañía Balance, también imágenes y extractos de los Hermanos Silva y del mimo Tuga.

Por respeto por el trabajo realizado, me gustaría nombrar algunas compañías o espectáculos que han sido pasos importantes en el desarrollo de la escena del circo de los últimos años y que no están presentes aquí en imágenes: El Horizonte Cuadrado, Diminuto Circus, Circo de las Máquinas, Especulación sobre el humano, Sombra compañía, Oxida2 – Treinta horas en mí,
Tejiendo de la compañía en el aire y la Compañía En la Cuerda. Es imposible no mencionar a todos pero si decir como es importante el trabajo de todos los núcleos de circo presentes a lo largo de Chile, que crearán desde su barrio hacia la comunidad y destacar especialmente las gestiones colectivas de la Carpa Azul y de la Cuarta Estación.

 

Sobre Alain Veilleux

Alain Veilleux se formó en la Escuela Nacional de Circo de Montreal (1989-92). Egresa con el número de trapecio en dupla Phébus et Borée, ganando varios premios internacionales en festivales de circo (Verona, Italia – Piste aux Espoirs, Bélgica –
Wuquiao, China).
En 1994 funda Payasos sin Fronteras Québec y luego es llamado por el Cirque du Soleil como entrenador para iniciar el proyecto Cirque du Monde (Santiago-Rio de Janeiro-Recife), y pasa a ser coordinador del proyecto en América del Sur.
En 1995 hace la dirección aérea del espectáculo Kaboum, Intrepida Trupe en Brasil.
En 1998 es director artístico del “Primer Encuentro de Circo Social de América del Sur” en el Circo del Mundo-Chile y dirige el espectáculo ZirkoZita en Santiago, es co-fundador de la corporación.
Desde el 2002 se dedica a la dirección de espectáculos de circo en Europa. Trabaja como director artístico y coreógrafo aéreo con Circo da Madruga, Cirque Baroque, Circo Paradisio, Tout fou to Fly, Kanbahiota, Les Bleus de Travail, AOC, entre otros.
En 2007 empieza una larga colaboración con la Cía. Luna Caballera en Canadá, incorporando el vocabulario del circo ecuestre. Un año después funda “La Centaurée, laboratoire de cirque”, con un proyecto de desarrollo de circo regional y crea el festival de circo Cirque en Fleuve (cuatro ediciones a la fecha), con residencias de creación.
En el 2104 el Consejo de las Artes de Canadá le entrega un premio por su trayectoria y es reconocido por el Gobernador General de Canadá, por el trabajo hecho en las relaciones Canadá-Chile. Desde 2017 regreso a Chile y a dirigido el Principito Circo y La Sangre de la Tierra ultima creación del Circo del Mundo-Chile. En 2018 integra un laboratorio de creación en 6 regiones, a lo largo de Chile. Este culmina con un espectáculo espontáneo que abre una reflexión nueva interrogándose sobre el lugar y la responsabilidad del artista en tiempo de Antropoceno.
Alain Veilleux, cuenta con más de 30 años de profesión, ha dirigido más de 15 espectáculos, fundado organizaciones destinadas a desarrollar el circo en su dimensión social y artística. Veilleux sostiene hoy la convicción que todas acciones se basan sobre la necesidad de creación de los artistas.